Me senté en la orilla dibujando corazones en la arena, cuando una ola trajo a mis pies una botella. La ignoré pero de nuevo la volvió a traer a mí. La cogí con la intención de tirarla más tarde a la basura, pero al cogerla vi que dentro había un papel. Quité la arena de la botella y la curiosidad me llevó a leer el mensaje:
"Apareciste de la nada, sin quererlo, sin buscarte y cuando quise darme cuenta ya me sentía atrapada. Quise alejarme pero ya no pude, el amor era más fuerte que yo. Sabía que no sería fácil, pero soy fuerte y tengo la paciencia necesaria para esperarte.
Amarte es mi destino."
Sentí una punzada en mi interior, las lágrimas brotaron de mí... Un mensaje en una botella que parecía salir de mí.
No cabe duda de que nunca tiré esa botella.
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